dimarts, 9 d’agost del 2011

"¿Se da cuen?"

El predicador que se montó en el bus que nos llevaría a Panajachel el viernes me marcó profundamente. Decía constantemente: "¿Se da cuen?". Cuenta es demasiado largo para un predicador, tiene muchas otras sílabas que decir. Algunas de sus brillantes aportaciones fueron: "Oramos por Álvaro Colón y por el próximo presidente / Cristo es el camino de la verdad y la vida / Rogamos por Sololá / Jóvenes, pórtense bien, recuerden que Dios los ama / Amigos extranjeros, Dios los bendiga". Pero lo que realmente nos sorprendió fue (1) que pidiera dinero por dar el sermón sin que nadie lo hubiera pedido y que la gente se lo diera y (2) que, mientras él llevaba a cabo su misión, docenas de vendedores ambulantes subieran al bus anunciando a viva voz lo que vendían: pizza, hamburguesas, chuchitos, helados, pasta de dientes, carteras, tijeras, maquinillas de afeitar, medicamentos mágicos que curan cosas tan dispares como "orinadera", úlcera y cáncer de ovarios.... Obviamente no se oía nada en ese momento. [...]



Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada